viernes, 7 de mayo de 2010

Diego Schoening: Soy tu fan.

No es broma, pero explico el por qué del título de esta entrada que al parecer no tiene nada que ver con el blog.

Desde el 2007 existe una propuesta para un acuerdo comercial multinacional (en que México se ha unido a las negociaciones) llamado ACTA o Acuerdo Comercial Anti-falsificación, por sus siglas en inglés.

Este acuerdo comercial tiene como objetivo proteger la propiedad intelectual estableciendo normas internacionales para lograrlo; algunos paises involucrados en las negociaciones son: Estados Unidos, Nueva Zelanda, Corea del Sur, Jordania, Marruecos, la Unión Europea, México, entre otros.

Aunque parezca algo de todos los días sin ningún trasfondo, la realidad es otra. ACTA ha estado llena de irregularidades desde su nacimiento y oculta al público. De ser aprobada, los paises involucrados se comprometerían, entre otras cosas, a violar la privacidad de los usuarios y a obligar a las compañías proveedoras de servicios de internet (ISP) a instalar los mecanismos necesarios para realizar esta tarea. Los ISP deberán informar si existe la sospecha de que un usuario esta violando de alguna forma los derechos de autor de alguna obra, para que la instancia correspondiente, tome cartas en el asunto.

¿Y qué tiene que ver todo esto con el ex-Timbiriche?. Fácil. Una de las industrias detrás de todo esto que se desea "proteger" es la de la música. Lamentablemente, dicha industria sigue aferrada a un modelo comercial obsoleto y sin futuro que a la fuerza quieren mantener.

Hay quienes ya se dieron cuenta que la industria de la música tiene dos caminos: Seguir así y convencer a la fuerza a los consumidores a comprar los productos haciendo uso de medidas como ACTA o evolucionar.

Diego Schoening prendió su foco y apostó por una nueva forma para distribuir su trabajo. ¿El resultado? Vendió más de 800,000 copias!! Aplausos!!! Más que Alejandro Fernandez!!

"Bueno, pero seguramente lo respalda una disquera con experiencia" podrían decir. ¡Para nada! Este tipo le vendió 300, 000 copias a la compañía de jabones a la que le hace los comerciales y el resto una tienda de videos, pudiendo así, llegar a su público sin seguir las "formas tradicionales" de distribución. En palabras de Rene Franco: "Se paso por el arco del triunfo a toda la industria de la música en México".

Y no todo termina ahí. Este ex-Timbiriche también esta en contra de las rídiculas medidas propuestas por ACTA, dando un ejemplo de que sí se pueden hacer las cosas bien. Al final el consumidor es beneficiado y el se lleva su merecida contribución por su excelentre trabajo.




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